La pobreza en México afecta al 44% de la población, son 55.654,225 personas. Seres
humanos, hombres y mujeres, desde la niñez hasta la edad más avanzada, personas que
padecen una situación de carencias que limita sus libertades, conculca sus derechos y
amenaza su vida de muchas maneras.
La pobreza en la perspectiva socioeconómica usada en el análisis de la realidad es una
condición negativa. Es una afrenta a la dignidad humana y por ende un pecado social que
puede y debe ser enfrentado como lo enseña el magisterio social de la Iglesia.
La pobreza “clama al cielo” y debe interpelar la conciencia de todas las personas, incluidas
por supuesto quienes la padecen, pero también el conjunto de la sociedad mexicana. Es
además una realidad inaceptable pues puede ser transformada y erradicada, al menos en
sus aspectos más nocivos y agudos.
Para actuar frente a la pobreza, hay que entenderla y el primer paso es dimensionarla y
ubicarla geográficamente (en territorio) y socialmente (en su concreción humana:
hombres y mujeres, niñas, niños, jóvenes, personas adultas y personas adultas mayores).
Los datos estadísticos no deben ser vistos como “fríos números”. Detrás de ellos están las esperanzas y sufrimientos de millones de personas que nos invitan a actuar. Conocer los
datos es indispensable para empezar a comprender las causas y los efectos, y sobre todo,
para actuar frente a ellas.
En México contamos con muy buenos datos. Tenemos una institución del Estado, prevista
en la Constitución con ese mandato (se llama Coneval). Y contamos con buenos datos
estadísticos para su trabajo, gracias a otra institución del Estado también prevista en
nuestra Constitución (Inegi).
Desde Acción Ciudadana Frente a la Pobreza nos empeñamos en usar los datos para
despertar conciencias, activar voluntades y promover cambios a todas las escalas, muy
especialmente en la escala macro de las instituciones y políticas públicas; en el “sistema”
que produce esta realidad lacerante.
En esta entrega comparto los datos básicos:
1. La pobreza está en todo el país. En el norte, en el centro y en el sur. En las grandes
ciudades, en los pequeños pueblos y en las localidades rurales aisladas. No hay un
territorio en nuestra geografía que esté “libre de pobreza”. Triste realidad.
2. Por tipo de territorio, la mayor cantidad, el 70% de las personas en pobreza viven
en localidades urbanas (39 millones de personas). Y 30% viven en localidades
rurales (16.6 millones de personas).
3. Los estados con mayor cantidad de personas en pobreza son: Estado de México
(8.3 millones, el 15% del total de la pobreza en el país); Veracruz (4.7 millones);
Chiapas (4.2 millones), Puebla (4.1 millones), CD MX (3 millones) y Guanajuato (2.6
millones). En estos 5 estados se concentra la mitad de la pobreza del país (49%)
4. Los estados con mayor incidencia de pobreza, es decir, la proporción de la
población que es pobre es mayor, son Chiapas (75%, o ¾ de su población);
Guerrero (66%, o 2/3 de su población); Puebla (62%); Oaxaca (62%); Tlaxcala
(59%); Veracruz (59%), es decir 6 de cada 10 en estos cuatro estados.
5. Por condición étnica, la mayor parte de los indígenas son pobres (73%), casi ¾
partes de las personas indígenas viven en pobreza. Son 8.5 millones de personas.
Por ahora basten esos datos. Información hay suficiente. No hay recetas mágicas ni
caminos fáciles o atajos rápidos. Pero sí hay salida. Debe construirse mediante el diálogo y
considerando los datos y la evidencia.
Comparto dos tablas con los datos básicos para las 32 entidades del país. En diciembre de
este año (2021), Coneval dará a conocer los datos por municipio. Esto permitirá análisis
territoriales más finos. Les invito a conocer las propuestas de Acción Ciudadana Frente a la
Pobreza comentada en el blog anterior (Fórmula México sin Pobreza) y disponible en
nuestro sitio web.
Hay dos aspectos relacionados sobre los que debemos reflexionar. La gigantesca miseria de millones de mexicanos depende entre otras razones del despido masivo y la reducción de salarios a los empleados que trabajan para empresas que buscan así tener mas ganancias con la venta de productos, pero el sistema económico capitalista se encuentra en un proceso de colapso porque los millones de pobres de acuerdo a los números del documento han dejado de comprar productos que no sean los indispensables para vivir como son los alimentos y una vivienda miserable. Debemos analizar la opción de comunidades autónomas que históricamente han sobrevivido como una alternativa ante la debacle mundial y nacional que se relata claramente en el documento.